Tras una semana llena de intensas emociones en la que tanto estudiantes, como padres y profesores hemos compartido emociones, experiencias y aprendizaje, esta mañana ha llegado el momento de ver partir a nuestros colegas alemanes.
La última actividad realizada ha sido un almuerzo de convivencia en nuestro instituto. En él, alumnos y profesores han continuado aprendiendo sobre gastronomía murciana al degustar productos típicos de nuestra región como la longaniza seca o el pastel de carne.
Los alumnos han conversado animadamente sobre todo lo aprendido estos días, no sólo a nivel curricular sino también personal. Juntos han rememorado estas jornadas, resaltando el enriquecimiento que como individuos les ha brindado el programa y el valor de lo aprendido sobre cada una de nuestras culturas en tan corto espacio de tiempo.
Con una pizca de sorpresa en la voz, que a la vez mostraba un cuantioso orgullo, han explicado cómo en tan sólo una semana han abandonado sus estereotipos, han perdido su inseguridad al hablar en una lengua extranjera e incluso han superado sus propios límites convirtiéndose en personas más abiertas y extrovertidas.
Finalmente, entre lágrimas, abrazos y promesas de una pronta visita, nuestros amigos alemanes se han marchado llevándose a Wiesloch un poquito de San Pedro y todo el cariño de la comunidad que conforma el IES Manuel Tárraga Escribano.